REGIONAL
La convocatoria de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia está abierta para el proceso de elección de gerente general, y el huilense Mauricio Rivera está convencido que el departamento tiene personas idóneas para ocupar estos cargos y lo que ha logrado a nivel profesional puede aportarle para llegar a ese puesto.
Mauricio Rivera, es un huilense de 57 años, ingeniero agrónomo con formación empresarial, quien hace 17 años es gerente de una cooperativa de caficultores, una empresa que busca, con indicadores reales transformar el bienestar de las familias, asignándole las herramientas para trabajar. Es un líder que le apuesta al trabajo, al desarrollo económico y a la productividad en torno al café.
Recientemente, inscribió su nombre con la aspiración de llegar a la Gerencia General de la Federación Nacional de Cafeteros de Colombia (FNC), considerada como una de las ONG rurales más grandes del mundo, una decisión que tomaría cuando tuviera el visto bueno y el reconocimiento del gremio cafetero.
En el departamento del Huila ha sobrevivido la caficultura colombiana, debido al esfuerzo de miles de familias que hoy se han convertido en el soporte económico de una región entera. Y es gracias al trabajo de muchas personas, en el que orgullosamente el ingeniero Mauricio Rivera hace parte, posicionaron en el mercado mundial nuestra región con el origen de café de mayor calidad y mayor reconocimiento en todos los cafés del mundo.
Le apuesta a potencializar esos logros, que en el café haya virtuosidad, generación de empleo, bienestar para las familias, piensa que “Se ha hecho mucho, pero todavía se puede hacer más”. Está convencido que, si es posible mejorar, y que el departamento tiene que liderar porque es quien sostiene gran parte de la caficultura colombiana. “Entonces por qué no un caficultor huilense, es la apuesta que estamos haciendo para que sean caficultores los que manejen la Federación de Cafeteros de Colombia”.
Admite que no es una tarea fácil, que tendrá que trabajar duro, y que hay que tener fundamentalmente un respaldo del gremio, pero “tradicionalmente como todo nuestro país, ha sido influencia política, la parte gubernamental ha decidido en las disposiciones gremiales, evidentemente ha habido mucha política detrás, seguramente en la historia de la Federación, todavía lo debe haber y eso hace el reto aún más interesante”.
“En mi caso como caficultor huilense, asumir esa responsabilidad y ponerla al servicio de los caficultores de Colombia. Es una aspiración que nace con el derecho y la ilusión de conseguirlo, y hay que intentarlo. Si la vida, Dios y los caficultores me permiten llegar, será para servirle a todos los productores de café de Colombia”, expresa.
Su objetivo fundamental es hacer que la actividad del café sea rentable para todos los caficultores de Colombia, pues cerca del 50% del total de los caficultores cultivan café en menos de una hectárea de terreno, y es inviable desde el punto de vista económico. Por este motivo indica que hay que trabajar para una reforma y darle herramientas a los caficultores para que puedan tener una actividad rentable, “porque sí es posible, y lo sabemos quienes cultivamos café”.
Actualmente son muchos los caficultores que no pueden vivir de la actividad, y una de sus metas es lograr que el Gobierno inicie un proceso de reforma agraria del café, para que puedan liderar y transformar miles de vidas.
“El Estado tiene que facilitar las herramientas para que el micro productor, voluntariamente quiera crecer y construir un mínimo de cultivo de café que le permita vivir con decencia, que acceda a la tecnología, mejore su calidad de vida. Las cooperativas tienen que ser protagonistas en primera instancia en un cambio para bien de la caficultura colombiana”, manifiesta.
Asimismo, piensa que al departamento del Huila debería tener más herramientas para los productores y que estos a su vez tomen la decisión de ser empresarios del café, y así obtener un mejoramiento real en su calidad de vida. “El departamento tiene indicadores que son susceptibles a mejorar, es una decisión gremial y voluntad política”, concluyó.
