Por: Pedro Javier Jiménez
Desde que inicié este bonito proceso de escribir semanalmente para LaÚltima.com.co , trato de generar en quien lee un momento de reflexión y compromiso, especialmente para contribuir desde nuestra condición de ciudadanos, a la construcción de una ciudad y un país mas conversado, con una ciudadanía más comprometida, participativa, incluyente y unida.
Debo decir que al señor alcalde de nuestra ciudad, el ingeniero Casagua Bonilla le he reclamado desde esta tribuna una mayor proyección de su liderazgo, buscando no solo que afronte con responsabilidad las difíciles y diversas problemáticas de nuestra capital, sino que se convierta en ese gran impulsor de unión y cohesión de nuestra sociedad.
Neiva te ama, es la primera acción de comunicación política de nuestro Alcalde, y debo decir que aunque básica en su forma, generó la expectativa suficiente para ponernos a conversar.
Ya sabemos que somos nosotros esa mala pareja que tanto daño le hace a Neiva; y estoy de acuerdo con el señor alcalde, ¿qué pasa que no nos movemos para adelante? ¿Qué pasa que seguimos sin cuidar la casa? Aplaudo esta campaña liderada por el Alcalde, espero con fe, que no se quede en el desfile, el discurso y los pasacalles, pues un mensaje tan valioso, como ‘Neiva Te Ama’, no se quedará ni en la mente, ni en el corazón de todo nosotros si no se activan las acciones que lleven a resultados en el corto plazo en términos de seguridad, malla vial, ornato y reactivacion económica.
Neiva te ama, es un compromiso de la Administración, ahora con súper poderes, para con coherencia y autoridad reorganizar una planta de personal que sea eficiente y suficiente para dar los resultados que los neivanos esperamos con voluntad.
Creo todos nos debemos unir a esta causa, emisoras, portales, periódicos, la comunidad en general, y que los generadores de contenido (influencers) también se monten en la onda de Neiva te ama, para que entre todos la podamos sacar adelante a nuestra capital.
El regalo más grande que podemos dar a Neiva en sus 412 años, es recuperar el civismo, la hospitalidad, el ornato, las buenas maneras a pie y a la hora de conducir. En fin, neivanos de verdad.