Redacción La Última
A pocos minutos de que la Corte Suprema de Justicia se reuniera nuevamente con el objetivo de escoger Fiscal General de la Nación, Amelia Pérez Parra una de las aspirantes renunció.
A través de una extensa carta, la exaspirante, manifestó su preocupación por los señalamientos y difamaciones que, según ella, le han hecho desde distintos escenarios en redes sociales y atribuciones que le han dado, y que han puesto en la palestra pública a su familia y puesto en riesgo su seguridad.
“La decisión tomada, HH magistradas y magistrados, obedece al surgimiento e interferencia de factores extraños a una tranquila y pacifica elección, los cuales han sido atravesados por episodios perturbadores, como, por ejemplo, el cuestionamiento a opiniones ajenas a la suscrita difundidas en las llamadas redes sociales, pero que, absurdamente, han sido a mi atribuidas sin fundamento alguno, en una anormal postura de querer aplicar el inexistente delito de opinión con el agravante que tales opiniones son elaboración exclusiva, y excluyente, de un tercero, pero que sus consecuencias, increiblemente, deben ser asumidas por persona distinta a quien las emitió, en un claro desconocimiento del principio universal del derecho penal, según el cual, la responsabilidad es estrictamente individual y/o personal”, dice la misiva.
Y agrega, “en segundo lugar, señoras y señores magistradas y magistrados, los inéditos episodios emergidos en este proceso de elección, han tocado las puertas de la quizá principaliísima virtud de todo ser humano, bien igualmente personalisimo, como es LA DIGNIDAD, injustamente ultrajada y vituperadas por circunstancias completamente ajenas a quien adquirió la condición de sujeto pasivo de tales despropósitos, ello sin dejar de lado que, al parecer asistimos, la suscrita y todo mi entorno familiar, a una revictimización que parece no tener fin, aparte de la violencia de género fundamentada en trinos cuyo autoria es completamente ajena a la suscrita”.
¿Qué pasará con la elección?
Frente al interrogante que queda, de si se puede elegir sobre las otras candidatas que quedan, o se debe presentar una nueva terna, juristas expertos difieren sobre la interpretación de esta nueva realidad en la elección de fiscal general.
Para algunos, no pasa nada porque la terna aún no se ha “desarmado”, “La renuncia solo surte efecto cuando se acepta. La renuncia debió presentarse ante el nominador (Presidente) y no ante el elector (Corte Suprema) y la Corte ni siquiera tiene la consideración de la renuncia en el orden del día. Hay terna”, dice el abogado penalista Francisco Bernate.
No obstante, otros expertos señalan que no es así, “Es de interpretación de las normas que regulan el caso. Sin embargo, la elección es de una terna, al faltar la tercera, debe comunicarse de inmediato al presidente para que terne a la faltante. De no hacerse así se podría tumbar la elección”, señaló la abogada Lorena Parrado.