Por: Fredy Tovar Montenegro
Antropólogo Universidad Nacional de Colombia
Opinión
Algo que inicialmente nos quisieron vender las voces de la prensa oficial afirmando que 500 millones de pesos fueron aportados a la campaña del actual presidente por Diego Marín, alias Papá Pitufo, reconocido delincuente traficante histórico y financiador de muchos líderes políticos, funcionarios de la DIAN, militares, oficiales de las policía fiscal y aduanera, abogados y figuras de la farándula nacional, hoy está siendo leído como otra de las ollas podridas que se empiezan a destapar y que nos tienen a la expectativa pues las declaraciones de este pilluelo de las tiras cómicas infantiles serán de alto calibre.
Está claro que El Presidente Petro rechazó y ordenó la devolución de los dineros que intentó infiltrar Diego Marín en su campaña, sin embargo, los posibles nexos de Benedetti con este contrabandista pueden infamar al gobierno actual, que se empeña en amparar y sostener a ultranza a este otro pilluelo y su adalid la actual ministra de relaciones exteriores Laura Sarabia.
Si bien es cierto el sonajero se activó por la detención de este contrabandista en Portugal en el mes de diciembre solicitado por la Fiscalía colombiana, las aventuras de papá pitufo involucran a diferentes mandos de la Policía fiscal y aduanera (POLFA), a variados abogados, jueces y fiscales, expresidentes, gobernadores, alcaldes, congresistas y demás especímenes de la política nacional y de las instituciones corrompidas del Estado, que por cerca de 30 años han operado bajo las directrices del contrabandista.
De igual manera y no menos sorprendente, la carta que desde Estados Unidos fue enviada por otro famoso de las tiras cómicas infantiles, el Oso Yogui también conocido como el hombre del maletín, quien en ella promete colaborar con la Fiscalía colombiana para revelar detalles de hechos de corrupción que involucrarían al bailarín de la Familia Char, el actual alcalde de la arenosa, el Señor Alejandro, se convierte en una olla podrida a punto de ser esclarecida. Es importante reconocer que en la misiva se nombran varias empresas del Clan Char y se menciona al partido Cambio Radical.
El autor de la carta escrita desde Miami fue valorado por la Exsenadora Aida Merlano como uno de los hombres más cercanos al alcalde de Barranquilla, quien, según ella era el encargado de hacer todas las “vueltas especiales” del señor Alex Char.
La carta contenida de afirmaciones que prometen esclarecer los escándalos más grandes de corrupción en Barranquilla por parte de la casa Char, es la primera alarma que se enciende en este capítulo de denuncias y esclarecimientos que dejarían muy mal parados a los Char y su monopolio costeño en el Caribe colombiano.
Héctor Amaris Rodríguez (alias el oso Yogui) exasesor de Alex Char afirmó en su misiva que “tras más de 14 años trabajando dentro del círculo cercano del alcalde, fui testigo directo de prácticas corruptas lideraras por el alcalde y sus socios estratégicos, testaferros, colaboradores cercanos, directores del partido Cambio Radical, funcionarios de la alcaldía de Barraquilla y diversas empresas fachada”.
La experiodista que se asume como la candidata presidencial que será la salvación de los problemas estructurales de corrupción es a su vez la esposa de Jose Amiro, hombre perteneciente al clan Gnecco y socio incondicional de los Char.
Será que las declaraciones del Oso Yogui y sus destapadas de olla serán tan evidentes que salpicarán a los Gnecco?
Claro es que, como candidata, Vicky no es ni siquiera buena periodista!
Parafraseando a nuestro novel de literatura, “en Colombia detrás de cada gran poderoso y rico hay más de un burro muerto en el camino”.
Que hablen de una vez los dibujos animados.
