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El aumento de los honorarios y del número de sesiones de los concejales, aprobado a mitad de este año, generará en 2025 un incremento millonario en los gastos de funcionamiento de 35 municipios del Huila, que deberán cubrirlo sin haberlo previsto en sus presupuestos. El tema será uno de los puntos centrales hoy en el Encuentro Nacional de alcaldes y concejales de la Federación de Municipios, donde se buscarán salidas para mitigar el impacto fiscal.
Hay preocupación entre las alcaldías de municipio del Huila por el aumento en el pago de honorarios a los concejales, medida que empezó a aplicarse en 2025 y que no fue contemplada en los presupuestos aprobados en 2024. El ajuste, aprobado en cuarto debate en el Congreso y sancionado a mitad de año, modifica tanto el valor de los honorarios como el número de sesiones ordinarias y extraordinarias que deben realizar los concejos municipales.
La nueva disposición fija en 296.314 pesos el valor por sesión para los concejales de municipios de quinta y sexta categoría, igualándolos con los de cuarta. Este cambio afecta directamente a 35 municipios huilenses que están en sexta categoría y que antes pagaban un valor menor por sesión. Neiva es el único municipio del departamento que no tendrá variación en este aspecto.
Además, se incrementa el número de sesiones ordinarias de 70 a 80 al año, y las extraordinarias —que son convocadas por el alcalde— pasan de un máximo de 20 a 40. Esto implica que, en el caso de un concejal de sexta categoría, solo las sesiones ordinarias costarán alrededor de 23,7 millones de pesos anuales, frente a los cerca de 20,7 millones que representaban antes. A esto se suman las extraordinarias, que a precios actuales pueden alcanzar los 5,9 millones de pesos adicionales por concejal si se realizan las 20 previstas hasta ahora, o cerca de 11,8 millones si se agota el nuevo tope de 40 sesiones.

En Palermo, el alcalde Kleiver Oviedo reconoció que la labor de los concejales merece ser retribuida, pero advirtió que la norma genera un reto fiscal. “Muchas veces los concejales trabajan en favor de las comunidades, con el honor de proyectar un mejor futuro para los ciudadanos que representan”, dijo, pero añadió que “a veces se aprueban leyes sin dejar asignados recursos adicionales, y eso recae únicamente en los gobiernos municipales. En un municipio como el nuestro, con más de mil kilómetros cuadrados de extensión, 600 kilómetros de vías y más de 40.000 habitantes, tenemos múltiples necesidades represadas”.
Para un concejo municipal con 13 integrantes, por ejemplo, el aumento en el costo anual de las ordinarias representará un gasto adicional cercano a 39 millones de pesos. Si además se autoriza el máximo de extraordinarias, el gasto global podría superar los 153 millones de pesos por año solo en honorarios.

El alcalde de Garzón, Francisco Calderón, aseguró que en su municipio el impacto anual será cercano a los 600 millones de pesos, sumando honorarios y cargas prestacionales. “Celebramos que se reconozca la labor de los concejales y que sus honorarios mejoren”, manifestó, pero recalcó que “es una ley sancionada a mitad de vigencia, con la complejidad de que no quedó presupuestada para 2025.
El gobierno nacional debería asumir ese valor para que no genere desequilibrio en las finanzas locales”. Según explicó, las administraciones han debido recurrir a contracréditos y adiciones para cumplir, mientras la Federación Nacional de Municipios solicitó incluir el gasto en el presupuesto de 2026.

En Tello, el alcalde Fernando Alipio Solano estimó que el incremento pasó de 179 millones que estaba previsto los gastos de honorarios a 476 millones de pesos, dependiendo del número de extraordinarias que se convoquen. “Fue una ley sancionada en junio, cuando el presupuesto para 2025 ya estaba aprobado desde noviembre del año pasado. Nos hemos reunido con el equipo financiero para ver cómo cumplir, sobre todo para cubrir las últimas sesiones ordinarias de noviembre”, afirmó. Según indicó, no ha habido respuesta del Ministerio de Hacienda sobre si habrá algún apoyo, por lo que cada municipio ha tenido que buscar internamente los recursos necesarios.
Mientras tanto, las administraciones municipales estudian alternativas para cumplir con la nueva disposición durante 2025. Los alcaldes esperan que a partir de 2026 el aumento de honorarios y sesiones quede incluido dentro de los presupuestos anuales, con el fin de evitar desbalances y no afectar otras inversiones en infraestructura, salud y programas sociales.
