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Después de recorrer a pie más de 300 kilómetros desde Neiva hasta Bogotá, un grupo de mujeres cuidadoras de personas con baja dependencia funcional concretó una serie de acuerdos con entidades del Gobierno Nacional. La caminata, que comenzó como una manifestación simbólica por el reconocimiento de sus derechos, culminó con la instalación de ocho mesas de trabajo que reunieron a representantes de 15 instituciones del Estado y permitió alcanzar 40 compromisos formales.
Ilba Joana Trujillo, una de las voceras del grupo de cuidadoras, calificó como “satisfactorio” el resultado del encuentro en la capital. “Tuvimos ocho mesas de trabajo con 15 dependencias del gobierno, donde pudimos lograr 40 acuerdos con todas estas entidades”, afirmó. Según explicó, algunas de las medidas comenzarán a implementarse de inmediato, particularmente aquellas acordadas con el Ministerio de Salud, el Departamento de Prosperidad Social (DPS) y el Ministerio de la Igualdad.
La movilización tuvo como principal objetivo exigir la reglamentación e implementación de la Ley 2297 de 2023, también conocida como la Ley de Personas Cuidadoras. Esta norma, resultado de años de lucha de colectivos de mujeres cuidadoras, reconoce el trabajo no remunerado de 20 mil mujeres en el Huila, quienes se dedican al cuidado de personas con discapacidad con bajos niveles de autonomía.
Uno de los puntos centrales abordados en las mesas de trabajo fue la necesidad de caracterizar adecuadamente a las personas cuidadoras en el país. El Ministerio de Salud se comprometió a iniciar un proceso de pilotaje con dos líneas de acción: una para cuidadoras y otra para asistentes personales. Además, una mesa virtual para revisar los avances en esta caracterización y evaluar la posibilidad de incluir en las certificaciones de discapacidad la necesidad o no de un cuidador.
Trujillo explicó que este paso es crucial para garantizar una inclusión real en los programas estatales. “En el DPS y en el DNP acordamos que el nuevo sistema SISBÉN, que ya viene con la versión seis, no nos caracterice por lo que se tiene, sino por las condiciones de vida que llevamos como cuidadoras. La brecha de desigualdad y pobreza es bastante amplia”, señaló.
Por su parte, María Elsie Piñacue, también participante de la caminata, destacó que la movilización fue un acto de representación. “Marchamos para hacer la voz de las que no tienen voz. Representamos a aquellas 20 mil madres que no pueden salir a defender los derechos de sus hijos y de las familias en condición de discapacidad”, dijo. Según Piñacue, si bien el pliego de peticiones fue abordado en su totalidad, ahora el enfoque debe estar en el cumplimiento de los compromisos. “Esperamos que esos 40 puntos se logren y se cumpla con lo que la ley ya establece”, afirmó.
Compromisos por sector
Durante los cuatro días de trabajo, entre el 6 y el 9 de mayo, se lograron compromisos en diversas áreas clave:
Ministerio de Salud
- Elaboración de un protocolo de atención integral para personas cuidadoras, cuyo plan de trabajo será remitido el 16 de mayo.
- Creación de una infografía explicativa sobre la Resolución 2646 de 2024.
- Inicio de procesos piloto de caracterización para cuidadoras y asistentes personales.
Departamento de Prosperidad Social (DPS)
- Evaluación de criterios de accesibilidad en la oferta institucional para personas cuidadoras.
- Entrega de kits alimentarios (cantidad y territorios por definir).
- Organización de jornadas de entrega de donaciones provenientes de la DIAN.
- Reunión virtual para socializar la oferta del DPS.
Departamento Nacional de Planeación (DNP)
- Inclusión de recomendaciones de las cuidadoras en la actualización del módulo SISBÉN IV y del Registro Social de Hogares.
Ministerio del Trabajo
- Promulgación de perfiles ocupacionales para cuidadoras y asistentes personales a partir del 24 de julio.
- Inclusión de medidas específicas para cuidadoras en la política pública de trabajo digno y decente.
- Incorporación de acciones dirigidas a cuidadoras en la política pública de teletrabajo.
- Desarrollo de estrategias pedagógicas para la reforma pensional, en articulación con otros ministerios.
Ministerio de Vivienda
- Socialización de criterios del programa de mejoramiento de vivienda según el Decreto 0413 de 2025.
- Recepción de información para considerar a las cuidadoras en los programas de vivienda rural y urbana.
Fondo Nacional del Ahorro (FNA)
- Análisis de la base de datos de cuidadoras y diseño de estrategias para facilitar su acceso a programas VIS y VIP.
- Promoción de cuotas inferiores a \$400.000 para personas con ingresos de hasta dos salarios mínimos.
Ministerio de Educación
- Expedición de una circular con orientaciones educativas antes del 24 de julio.
- Inclusión de cuidadoras en procesos educativos y de cualificación.
Ministerio de Agricultura, Agencia de Desarrollo Rural (ADR) y Agencia Nacional de Tierras (ANT)
- Presentación de oferta sectorial a la Red de Cuidadoras.
- Asesoría a organizaciones de cuidadoras para diseño de perfiles de negocio.
- Identificación de aspirantes a procesos de adquisición de tierras en junio.
Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF)
- Revisión de casos de familias no trasladadas a la Dirección de Familias.
- Creación de un comité consultivo para el seguimiento de casos vinculados a NNA.
- Sensibilización del personal del ICBF sobre el rol de las cuidadoras.
- Implementación de campañas informativas sobre cuotas de alimentos.
SENA
- Evaluación de cursos específicos para cuidadoras, incluido un programa de auxiliar de enfermería.
- Remisión de oferta formativa antes del 16 de mayo.
La ruta hacia el reconocimiento
Las cuidadoras esperan que estos acuerdos representen un avance hacia el reconocimiento de su labor como un trabajo esencial. Entre los puntos más relevantes se encuentra la posibilidad de recibir una remuneración, algo que hasta ahora ha sido una de las demandas históricas del sector.
“La finalidad es que se reconozca este trabajo como un empleo digno. Es algo que se ha hecho desde el corazón, pero que también requiere garantías y respaldo del Estado”, comentó Trujillo.
La marcha, además de visibilizar la situación de miles de mujeres que se dedican al cuidado de personas con discapacidad en condiciones precarias, permitió abrir canales de diálogo directos con entidades gubernamentales que, en muchos casos, no contaban con datos claros sobre esta población.
Próximos pasos
En los próximos meses, las organizaciones de cuidadoras mantendrán seguimiento a la implementación de los compromisos adquiridos. Algunas acciones tienen fechas claras de cumplimiento, como la entrega de documentos y reuniones técnicas, mientras que otras dependen de procesos más largos de articulación interinstitucional.
“Vamos a hacer veeduría ciudadana y estar pendientes de cada paso. Esto no termina con una caminata ni con una firma; empieza con la acción y la vigilancia”, concluyó María Elsie Piñacue.
El proceso, considerado histórico por muchas de las participantes, representa un precedente para futuras demandas sociales en el país. Las cuidadoras de personas con discapacidad han logrado instalar su voz en el centro de la agenda pública, exigiendo condiciones dignas y reconocimiento estatal.
