Redacción La Última
A 42 meses y 6 semanas de prisión, y una multa de 46 salarios mínimos, fue condenado Julián Ernesto Polania Echevez, por las graves lesiones que le causó al bombero Ricardo Rivera.
Los hechos tuvieron lugar el 19 de septiembre de 2015 a eso de las 03:30 de la madrugada, luego que Ricardo Rivera en compañía de su pareja y otra persona, salieron de la discoteca Romeo y Julieta y se dirigieron a comer una hamburguesa en un carrito ambulante ubicado a las afueras del lugar. En ese momento dialogaba con otra persona, cuando fue agredido por un señor de tez trigueña, robusto, camisa blanca con un escrito que decía ‘GORKY’ que sin mediar palabra procedió a golpearlo propinándole puntapiés hasta dejarlo inconsciente, causándole lesiones a nivel de boca, encías, nariz, cuero cabelludo, dedo anular mano derecha, ojo derecho, pómulo derecho, labio superior. Ante el ataque, Rivera Arce quien ha fungido como Bombero Voluntario de Neiva, fue defendido por las personas que lo acompañaban, mientras que el agresor, Julián Ernesto Polania Echevez, huyó en un taxi.
El hombre lesionado fue valorado por el Instituto de Medicina Legal que dictaminó entonces una incapacidad de 65 días, y secuelas de deformidad física que afectan el “cuerpo de carácter permanente”, señaló la delegada del ente acusador.
Es así que ante las contundentes pruebas presentadas por la Fiscalía, el Juzgado 11 Penal Municipal con Funciones de Conocimiento le dictaminó sentencia de primera instancia, donde además de los meses de prisión, le decretó una inhabilidad para el “ejercicio de derechos y funciones públicas durante un tiempo igual a la pena principal”.
Por ser un fallo de primera instancia, el sentenciado podrá apelar la decisión ante la Sala Penal del Tribunal Superior de Neiva.
