Redacción La Última
Los sectores aledaños a la sede de la Institución Educativa Patio Bonito de Nátaga – Huila, parece cualquier cosa menos un entorno escolar seguro para los 40 niños y niñas que allí estudian, y las dos maestras que imparten conocimiento en la institución.
Ubicada en la vereda La Esmeralda, a la cual es una odisea llegar por el mal estado de sus vías, que ni siquiera alcanzan a ser trochas, peor que eso, más bien son solo caminos veredales que en época de lluvias es todo un lodazal, la escuela de este sector necesita que sus estudiantes sean reubicados ¡ya!, pues el riesgo es enorme y si no se toman medidas, esta historia se convertiría una tragedia anunciada.
En los videos y fotografías facilitadas por la comunidad a este medio de comunicación, se observa la infraestructura del polideportivo de este recóndito lugar de la geografía huilense y se evidencia que está prácticamente destruido, la falla geológica ya afectó las bases del mismo, una gran grieta atraviesa el lugar que ya no se utiliza para hacer deporte por el gran riesgo, y esta ya va directo a la escuela.
Los riesgos
El primer riesgo que se detecta, y que la comunidad se lo ha hecho saber a las autoridades, es que se derrumbe la estructura del polideportivo y el techo caiga sobre la escuela. El segundo riesgo, es que la grieta siga acrecentándose y llegue hasta la institución, ocasionando un efecto de remoción en masa, ¡un peligro para los niños!. Incluso aunque el polideportivo es el más afectado, la sede educativa ya presenta grietas en su estructura.
Según la denuncia que hecha, Jan Jefferson Pacheco, docente y directivo de la Asociación de Institutores Huilenses, junto con la comunidad, la Gobernación del Huila ya tiene conocimiento de la problemática, ya visitaron la zona, evidenciaron el peligro, confirmaron la falla geológica y determinaron que lo más prudente es reubicar a los estudiantes en otra aula. Hasta ahí, bien. El problema es que la recomendación que hicieron es que se trasladen al salón comunal, que “literalmente” está al lado de la escuela.
Para la comunidad, trasladar a los niños al salón comunal no es viable porque seguirán corriendo el mismo riesgo, cuando lo prudente es buscar un lugar seguro, sin ningún tipo de riesgo en el que se les pueda garantizar su derecho a la educación.
Comunidad alerta
Y es que la falla geológica no afecta solamente a la escuela, también varias familias de la vereda La Esmeralda, mantienen alerta y si bien no han desalojado sus fincas porque viven de ellas, solo van en el día, trabajan, pero en las noches buscan otro lugar para descansar pues no quieren que los coja una emergencia dormidos.
En fin ante el riesgo inminente, lo que pide la comunidad son decisiones rápidas para evitar una tragedia. “Decisiones oportunas e inmediatas para poner a salvo a los niños y a las maestras”, expresó Pacheco.
¡Piensen en los niños! decía un personaje de una popular serie de televisión.
