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La cédula digital en Colombia, implementada por la Registraduría Nacional del Estado Civil desde 2020, tiene como propósito modernizar el sistema de identificación del país. Este documento no solo facilita la realización de trámites y reduce los tiempos de gestión, sino que también refuerza la seguridad en el manejo de los datos personales, promoviendo un entorno más eficiente tanto en la administración pública como en los servicios privados.
En 2024, el costo de la cédula digital varía dependiendo de la situación del solicitante. Para quienes la solicitan por primera vez al cumplir 18 años, el trámite es gratuito. Sin embargo, si ya se posee una cédula, ya sea amarilla o digital, y es necesario obtener un duplicado, el costo asciende a 68.900 pesos colombianos (aproximadamente 68,99 dólares estadounidenses). Este valor ha experimentado un ajuste respecto al precio anterior, que era de 63.050 pesos, debido a la inflación. El pago por la cédula digital puede realizarse en línea, a través del sistema PSE disponible en el sitio web de la Registraduría, o en diversos puntos de recaudo autorizados, como SuperGiros, 4-72, Banco Popular, Efecty y Matrix Giros. Después de completar el pago, el solicitante debe agendar una cita para la toma de huellas dactilares y fotografía, y posteriormente descargar la aplicación móvil para activar la cédula digital mediante un proceso de autenticación facial.
La cédula digital ofrece diversos beneficios que van más allá de la simplificación de trámites. Su implementación contribuye a un nivel superior de seguridad, al dificultar la falsificación o adulteración del documento. Además, incorpora mecanismos de identificación biométrica, como el reconocimiento facial y las huellas dactilares, lo que hace prácticamente imposible la suplantación de identidad. Esta tecnología también facilita la realización de trámites no presenciales, permitiendo a los ciudadanos completar procedimientos a través de plataformas digitales, sin necesidad de acudir a oficinas físicas. Asimismo, garantiza una mayor protección de los datos personales, ya que el acceso a la información está restringido y solo puede ser utilizado por las autoridades correspondientes.
En conjunto, la cédula digital ha sido diseñada para generar mayor confianza en los trámites y servicios de las entidades públicas y privadas, ofreciendo una forma más segura de verificación de identidad. Además, al asegurar la integridad de los datos, se refuerza la transparencia y la fiabilidad del sistema, proporcionando una solución eficiente para el acceso a diversos servicios ciudadanos en el entorno digital.