Política
Proteger la huella dactilar de cada ser humano, es decir, su actividad cerebral, es el propósito fundamental del Proyecto de Ley 395 de 2025, radicado por el senador Carlos Julio González Villa.
Actualmente, es posible diagnosticar, registrar la actividad del cerebro e incluso manipularlo, lo que motivó la presentación de esta iniciativa. Su objetivo es promover la investigación científica y el uso de las neurotecnologías en beneficio de la salud y la dignidad humana, dentro de un marco regulatorio ético y respetuoso de los derechos fundamentales.
“Queremos que las neurotecnologías sigan avanzando para que enfermedades como el Alzheimer, el Parkinson, la epilepsia y otros trastornos psiquiátricos y neurodegenerativos puedan tener mejores opciones de tratamiento. Pero también buscamos que se preserve la dignidad humana, evitando usos abusivos, lucrativos o económicos que vulneren lo más importante que tiene el ser humano: su cerebro”, enfatizó González Villa, quien también es profesional de la salud y experto clínico en comportamiento humano.
La iniciativa busca garantizar la protección de los neurodatos, la identidad y autonomía cerebral, la privacidad mental y la prevención de cualquier forma de manipulación neuronal y consecuentemente comportamental. “Esperamos que este proyecto de ley siembre una conversación y una discusión fundamental sobre los nuevos desafíos que nos traen la inteligencia artificial, las neurociencias, las neurotecnologías y, por supuesto, los derechos humanos”, concluyó el senador.
Este proyecto ha sido estructurado durante más de un año y medio en colaboración con la Universidad de los Andes y la Universidad del Rosario, con el respaldo de un equipo de expertos en neurociencias, derecho y bioética. Entre ellos, el Dr. Nelson Remolina Angarita, profesor de Derecho de la Universidad de los Andes y director del Grupo GECTI; la Dra. Ana Isabel Gómez, rectora de la Universidad del Rosario y directora de la Maestría en Bioderecho y Bioética; y la Dra. Diana Bernal, profesora e investigadora en jurisprudencia de la misma universidad.
“Un proyecto construido con la academia, sobre uno de los retos más grandes de la humanidad en el siglo XXI”, afirmó el senador González Villa.
Conceptos clave
Las neurotecnologías comprenden técnicas, instrumentos y dispositivos que registran, interpretan o modifican la actividad cerebral mediante tecnologías ópticas, electrónicas, magnéticas y nanotecnológicas, lo que permite comprender e intervenir en los procesos cerebrales.
En este contexto, los neuroderechos surgen como un conjunto de principios legales y éticos que garantizan la privacidad, autonomía e identidad cerebral, asegurando la libre toma de decisiones y el acceso equitativo a estas tecnologías.
Los neurodatos, por su parte, corresponden a la información obtenida a partir del registro de la actividad cerebral. Son únicos y personales, semejantes a una huella dactilar, y pueden utilizarse para comprender el estado de salud de un individuo, así como para predecir y analizar procesos relacionados con el comportamiento, la personalidad y los pensamientos.
