Redacción La Última
El joven auxiliar de la Policía Gustavo Alberto Esquivel en su narración a la Fiscalía sobre los terribles momentos de la masacre de sus compañeros, contó que fue lo que sucedió y como se salvó de ser acribillado por los perpetradores de la emboscada. Explicó que en el momento de los hechos, él viajaba en el platón de la patrulla, en la parte izquierda junto con unos plátanos que llevaba consigo.
De un momento a otro sintió la explosión y posteriormente las ráfagas de fusil, y decidió lanzarse del vehículo y empezar a disparar. “Yo sentí el bombazo y me tiré, les empecé a disparar y me defendí”, le dijo el uniformado a la Fiscalía que adelanta la investigación.
Posteriormente, según la versión que, se escondió entre la zona verde y empezó a alejarse de la escena del crimen. Señaló que encontró una alcantarilla y se refugió.
“Me tiré al matorral y me tiré a una alcantarilla. Esa alcantarilla me sacó más abajo”, dijo.
En su relato aseguró que al salir de la alcantarilla, le pidió ayuda a un campesino, quien le suministró ropa de civil con la que se le vio cuando fue rescatado.
“Llegué a una casa donde un viejito me prestó ropa para cambiarme. Luego llamé a una compañera auxiliar de policía y le conté lo que había pasado”, explicó.
Aún se espera que Medicina Legal entregué los cuerpos de los uniformados fallecidos. Por otro lado, se espera nuevamente la visita del presidente Gustavo Petro a Neiva junto al Ministro de Defensa, pues van a visitar al uniformado en la policlínica.
