Neiva
Los malos olores ya tienen aburridos a los residentes de los barrios ubicados en el norte de la capital huilense, según las denucias recibidas por este medio, al problema de soportar el olor a galpón, se le suma las afectaciones al bienestar y la tranquilidad de las familias, sin que la corporación ambiental CAM, de respuesta a tantas quejas.
Vecinos de Torres de Ipacarai, Amaranto, Portal el Cocli y toda el área de influencia de estos sectores residenciales, desde anoche perciben de nuevo un olor putrefacto que no es posible para el ciudadano determinar si es por mala disposición de la ‘basura’ en la elaboración de los concentrados, quema de hueso o residuos de animales que siguen generando un mal ambiente en las comunas del norte de la ciudad.
Son múltiples las inquietudes de los afectados: “¿Y ese olor a galpón hasta cuando ? “¿Por qué las entidades encargadas (CAM) no hacen nada y en las redes sociales las quejas son innumerables, exigiendo una solución.
Lo paradójico es que ese nauseabundo olor se siente en la sede de la Corporación Autónoma del Alto Magdalena CAM, es innegable que sus trabajadores pasen por alto este daño ambiental y hasta el momento no ha surtido efecto.
Aseguran que se trata de una fábrica de concentrado ubicado en la zona industrial del municipio de Palermo, a orillas de la desembocadura del Río la Ceibas, hay denuncias en la CAM y en varios juzgados a la espera de una respuesta, pero aún no ha pasado nada.
