ACTUALIDAD
Erika Morales, una joven oriunda de Pasto, Nariño, falleció tras haber quedado cuadripléjica debido a un ataque ocurrido en una discoteca. Morales, quien tenía 16 años en el momento del incidente, sufrió un golpe en la cabeza con una botella durante una discusión, lo que la dejó en coma y, al despertar, la dejó con graves secuelas físicas que afectaron su movilidad.
El caso de Morales atrajo la atención nacional debido a su lucha por obtener la eutanasia, después de enfrentar una vida marcada por la dependencia y las complicaciones de salud que resultaron del ataque. Tras su recuperación inicial, la joven vivió con parálisis total de sus extremidades y tuvo que lidiar con una serie de problemas médicos que empeoraron su calidad de vida.
A lo largo de los meses siguientes al ataque, Morales solicitó públicamente la eutanasia, una solicitud que fue respaldada por su familia. Sin embargo, antes de que pudiera ser llevada a cabo este procedimiento, la joven presentó complicaciones en su salud, lo que llevó a su fallecimiento de manera natural.
