Medio Ambiente
Indignación y tristeza ha causado un acto atroz contra la naturaleza. En un irrespetuoso suceso de insensibilidad ambiental, individuos inescrupulosos causaron un daño irreparable a dos árboles que solían ser el hogar nocturno de loros, en la carrera Quinta con 10, esquina de Neiva.
Unas perforaciones en sus troncos y la introducción de veneno en su estructura revelan una total falta de respeto por la vida silvestre que habita en este espacio. Es especialmente alarmante que estos árboles no solo sirvan como hábitat para diversas especies de aves, sino que también fueran el punto de encuentro y posadero de loros en horas de la tarde y noche.
El hecho no es obra del azar, sino de personas sin escrúpulos que, por razones aún desconocidas, decidieron atacar la naturaleza. Es urgente que las autoridades investiguen y lleven ante la justicia a los responsables de este ecocidio.
Loros nocturnos, reconocidos por su singular comportamiento y sus sonidos característicos, utilizan estos árboles como punto de encuentro y descanso.
En momentos como estos, es crucial recordar la importancia de la conciencia ambiental y la responsabilidad ciudadana.
Es momento de unirse como comunidad para repudiar estos actos de destrucción ambiental y trabajar en conjunto para la conservación y protección de nuestros espacios naturales.
La Secretaria de Ambiente de Neiva adelantó una visita técnica y toma de muestras para determinar si el estado actual que presentan los dos árboles es producto del uso de químicos, además de inició inmediatamente algunas acciones para tratar de salvarlos
